El Padre Manyanet aceptó el ofrecimiento del colegio-pensionado Virgen de la Misericordia de Canet de Mar (Barcelona), fundado por el sacerdote Fernando Roig y Palau. En setiembre de 1882 fueron enviado 6 religiosos, que se entregaron al trabajo con generosidad.
Pero por más que el sacerdote fundador era testigo presencial del empeño y esfuerzos de la nueva comunidad, él se mostraba muy remiso en cumplir con sus compromisos para con la misma. El Padre Manyanet lo observó de inmediato e hizo las oportunas advertencias al interesado y sus comentarios temerosos al P. Mullol.
Las relaciones de don Fernando con la comunidad se hicieron tan tirantes que, a primeros de 1883, al terminar el año escolar, el Padre Manyanet se vio obligado a retirar a los religiosos de la población.
